Historia de cómo nació la fe a la cruz de Jocohanca

 Se dice que en tiempos incas existía una huaca en el Cerro Jocohanca que servía de adoratorio a los lugareños de entonces. Al llegar los españoles a la zona en el siglo XVI la huaca fue destruida y reemplazada por una cruz, signo del impuesto catolicismo. Por versiones trasmitidas oralmente se sabe que la cruz originalmente implantada fue reemplazada por otra de mayor dimensión en el siglo XVIII, que perdura hasta la actualidad y se le conoce como "El Viejito".

Años después, se agrega una segunda cruz, que ahora se le denomina "El Surqueño Viejo" a la que posteriormente fue alcanzada por un rayo que lo partió en dos por lo cual se decidió cambiarla por otro nuevo madero, construido por don Perfecto Guzmán en 1910, madero que tiene la denominación de "El Surqueño Nuevo" trilogía que coinciden con las cruces del calvario y que son veneradas hasta la actualidad con gran fervor católico. En los primeros días de mayo también se festeja a la Santísima Cruz de Matakaka y Dos de Mayo siendo esta también una fiesta la cual no pierde las costumbres antiguas. Hacia el otro lado, en Yanamenco, hay una escultura de Cristo Blanco, que esta completo a la vista de San Mateo de Huanchor.